En la dinámica diaria de una sociedad, es común que los poderes otorgados a empleados, gerentes o asesores permanezcan vigentes durante años sin ser revisados. Sin embargo, mantener apoderados activos que ya no integran la empresa (o cuyas funciones cambiaron) puede representar un riesgo legal y operativo significativo.
Desde Nunes & Asociados recomendamos tener un listado de apoderados con sus facultades conferidas y realizar revisiones periódicas de todos los poderes vigentes, verificando que:
- Las personas designadas sigan efectivamente vinculadas a la empresa,
- Las facultades otorgadas se mantengan acordes a su rol actual, y
- No existan poderes obsoletos o con alcances excesivos.
¿Cómo se puede revocar un poder en Argentina?
El mandato (o poder) puede revocarse en cualquier momento por decisión del mandante, conforme al Código Civil y Comercial de la Nación (arts. 1320 y ss.), salvo que se trate de poderes expresamente irrevocables —lo que en la práctica es excepcional.
Las principales formas de revocación son:
1. Revocación expresa: mediante escritura pública o instrumento con firma certificada, con notificación fehaciente al apoderado.
2. Renuncia del apoderado: puede renunciar comunicándolo formalmente al poderdante.
3. Extinción automática: por fallecimiento o incapacidad del mandante o del apoderado, o por cumplimiento del objeto o vencimiento del plazo en poderes especiales.
Una vez revocado, es recomendable anotar la revocación en el Libro de Actas y comunicar la baja a bancos, organismos públicos o contrapartes que hubieran reconocido ese poder.
⚠️ Riesgos de mantener poderes sin control
No revisar los poderes vigentes puede derivar en contingencias graves, como:
- Actos realizados por apoderados que ya no pertenecen a la empresa, pero que siguen teniendo facultades válidas;
- Compromisos asumidos en nombre de la sociedad sin conocimiento del directorio o de los socios;
- Conflictos internos o reclamos de terceros por actuaciones no autorizadas;
- Problemas en auditorías o due diligence societarios, donde la falta de control sobre los poderes se considera una debilidad de gobierno corporativo.
Nuestra recomendación
En Nunes & Asociados sugerimos implementar una política de revisión anual de poderes, que incluya:
- Inventario actualizado de todos los poderes vigentes;
- Control de la vigencia y de la situación laboral o contractual del apoderado;
- Actualización o revocación de los poderes innecesarios; y
- Registro de toda modificación en los libros sociales.
Un control preventivo evita conflictos y refuerza la transparencia en la gestión societaria.
¿Querés que revisemos la situación de tu empresa?
Nuestro equipo puede ayudarte a auditar los poderes vigentes, preparar las revocaciones necesarias y actualizar la documentación ante escribano público y organismos correspondientes.
