ACTUALIZCIÓN 06/10/22
Así como no sirve tapar el sol con la mano, el freno del BCRA a los bancos que querían ofrecer criptoactivos a sus clientes, solo hizo que tarde un poco más, sea más caro y tenga una estructura más compleja (como mencionamos en la actualización anterior). También, incentiva que los fondos de los ahorristas que quieran acceder a las criptomonedas salgan del sistema bancario argentino (hacia exchanges que operan localmente o directamente a bancos virtuales radicados en países con regulaciones más amigables.
Así es como NuBank, banco virtual de Brasil, ofrece desde julio a sus millones de usuarios la posibilidad de operar con criptoactivos. Según las investigaciones oficiales la cantidad de usuarios de estos activos en 2021 creció en Brasil un 938%.
Este es un nuevo ejemplo de cómo las regulaciones en materia de criptomonedas pueden hacer que los negocios, usuarios y activos crucen fronteras sin ningún esfuerzo. Al final, probablemente sean los países que ofrezcan el mejor balance entre seguridad jurídica y agilidad los que capturen la mayor parte de esta industria multibillonaria.
ACTUALIZACIÓN 18/08/22
Conforme mencionamos en nuestro artículo original (a continuación), el sector bancario tradicional no quiere quedarse afuera de los productos y servicios relacionados con criptoactivos, sobre los que hay gran demanda en Argentina. Como bien cubre iProUp, el Banco Galicia sacó un nuevo Fondo de Inversión que opera comprando y vendiendo criptomonedas, particularmente Bitcoin y Ethereum.
Por supuesto que tener una cuota en la inversión de un fondo que opera en mercados cripto no es para nada lo mismo que poder comprar estos activos en forma directa pero que sus usuarios puedan acceder indirectamente a un ETF (Exchange Trade Found) que opera cripto, ya es un gran paso adelante.
Es importante aclarar que solo un 10% del fondo se encontrará en criptoactivos, el resto de la cartera está compuesta mayoritariamente por activos locales. Esto quiere decir que, si a las acciones argentinas les va mal, por más que BTC y ETH suban, probablemente el valor del fondo caerá.
ARTÍCULO ORIGINAL
A la mayoría de nuestros lectores no les va a sorprender esta noticia, ya que es de casi lo único que se habló en el ecosistema crypto argentino en la primera semana de mayo. ¿Qué pasó? Un banco tradicional argentino quiso ofrecer servicios de compra y venta de criptomonedas. ¿Cuánto duró? Spoiler alert: ni una semana. ¿Va a ser una posibilidad a futuro? No sabemos. ¿Cuánta repercusión tuvo? Mucha, y llegó a otros continentes. ¿Los involucrados sabían lo que iba a pasar? Seguro nos enteraremos en los próximos meses.
Para explicar por qué llegamos a este escenario, es necesario un poco de contexto. La Argentina para lograr refinanciar su deuda externa, necesitó llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que se viene negociando desde la asunción del actual gobierno (más de 2 años). Una de las condiciones de la “letra chica” y que realmente se consideró menor a la hora de firmar, es el compromiso del país de “desalentar el uso de criptomonedas”. En un acuerdo para refinanciar 45.000 millones de dólares, este no es el tipo de cláusula por el que se pelea demasiado. Para más información sobre este tema y la reacción de la comunidad, recomendamos este artículo del medio especializado BeInCrypto.
No es novedad que los centros de poder financiero tradicionales y los Estados hegemónicos no quieran que crezca tanto una industria capaz de reemplazar el dinero (por más que siempre se intente justificar que es por la falta de información financiera). Junto con las exigencias para conocer a las personas detrás de las billeteras (“KYC” por sus siglas en inglés), son las regulaciones que más abundan en este mundillo tan convulsionado que son las normas aplicables a las criptomonedas. Ya el Banco Central de Argentina (BCRA) se encontraba en un proceso de regulación fuerte a los Procesadores de Servicios de Pago (PSP), responsables de las billeteras virtuales. Sobre las últimas normas aplicadas al KYC para PSP, recomendamos este artículo de iProfesional.
Lo que nadie esperaba, es que un banco tradicional quisiera entrar en el negocio crypto de las Exchange. Es cierto que Brubank (banco digital, más moderno) informó al mismo tiempo que Banco Galicia que iba a habilitar la posibilidad de comprar y vender crypto a sus clientes en sus plataformas, pero fue el segundo el que se llevó todos los reflectores por el temblor que ello podía significar en la banca tradicional y todo el sector financiero. Supuestamente más del 60% de los clientes encuestados deseaban poder comprar crypto con su cuenta bancaria.
El 3 de mayo, todos los medios (especializados o no) cubrían la noticia: iProUp, Clarín, Ámbito Financiero, entre otros. La operatoria estaba lista: el proveedor de tecnología del Banco (Lirium) es una empresa habilitada para operar en Argentina, EEUU y Europa. Además, no era una actividad prohibida, ya existían otras empresas dando el mismo servicio (Exchanges), se iba a ofrecer solo a inversores con perfil agresivo, el KYC lo haría el banco, la tecnología es la misma que ya se usa para Homebanking, se cobrarían los impuestos habituales para transacciones bancarias y comisiones por servicio, el principal responsable siempre sería el banco, iban a trabajar con monedas Top20 y se planificaba una segunda etapa incluyendo finanzas descentralizadas (DeFi).
Era una noticia de gran augurio para la adopción masiva de las criptomonedas en un país que ya está en el Top10 de adopción y una competencia muy importante para las exchanges (que iban a tener que luchar por el mercado contra un gigante financiero). Incluso fuentes dicen que los cuadros técnicos del BCRA estaban al tanto y que ratificaron que no se requería una licencia especial y era lícito el contrato a celebrarse; solamente no lo recomendaban en base al riesgo y volatilidad que implican estos activos.
Luego de un día que parecía que iba a cambiar todo, empezó a no cambiar nada. El 4 de mayo (ni 24 horas después de que estuviese disponible el servicio), el BCRA saca dos tweets de advertencia a los usuarios sobre los riesgos de comprar criptoactivos. Hasta acá únicamente se tomaba un rol de prevención y precaución a la población en línea con el comunicado conjunto BCRA – CNV de mayo y septiembre 2021 (que sostiene la misma postura que expresaron en 2014). Al respecto se puede consultar nuestro artículo.
Esto desató una serie de chicanas, humoradas y críticas más serias en la red social, atacando a la entidad responsable de mantener el tipo de cambio, bajo el lema “el problema son los pesos”. Al respecto, pueden chequearse los hilos en la cuenta oficial del BCRA en Twitter o ver este resumen de Cryptonoticias. No vamos a echarle la culpa a una serie de ahorristas enojados a través de Twitter de la decisión regulatoria del BCRA, pero cuando se alinean la oportunidad política, necesidad de cuidar reservas, una billetera recién abierta de 100.000 millones de dólares a la vez que se pierde la “batalla en redes”, es difícil que cualquier iniciativa privada resista.
Finalmente, el 5 de mayo (48 horas de activo el servicio), pasa lo que todos ya sabemos: el BCRA saca un comunicado que anuncia la prohibición de las operaciones con criptoactivos a través de bancos y entidades financieras reguladas por él. La noticia de nuevo sale en todos lados: La Nación, iProfesional, etc. Ya poco importa lo que dijeron los cuadros técnicos respecto a que no era ilegal, menos aún cuántos usuarios realmente quisieron operar y conseguir sus primeras criptomonedas o cómo tendrá que hacer el banco para retrotraer estas operaciones. 2 días después de haberlo dejado pasar los propios funcionarios del BCRA, el Directorio dice que “los bancos se quisieron aprovechar de un área gris” de la normativa. Respecto al supuesto conocimiento de funcionarios del BCRA, la respuesta extraoficial fue que “los que tenían que saber, no sabían”.
Recordemos que el compromiso firmado por Argentina con el FMI dice: “El Gobierno Nacional, para una mejor salvaguarda de la estabilidad financiera, desalentará el uso de criptomonedas en la prevención del lavado de dinero y la informalidad, así mismo la digitalización de pagos tendrá incentivos oficiales y se le dará protección adicional al consumidor financiero.”. Siendo el BCRA un ente dependiente del gobierno argentino, casi que era esperable una oposición política.
La explicación (completamente insuficiente e incluso errada), es que la función de las entidades financieras tiene que “estar orientada a financiar la inversión, la producción, la comercialización, el consumo de los bienes y servicios requeridos tanto por la demanda interna como por la exportación” y el Presidente del BCRA ya dijo que considera a estos activos como meramente especulativos y que no tienen ningún valor detrás. Llama la atención que se considere que un sector con tasas inaccesibles, un tipo de cambio desdoblado y un sistema de acceso al mismo completamente inaccesible y con miles de barreras no arancelarias cumple con los objetivos que menciona este comunicado (o que lo hace mejor que las criptomonedas).
Nada se dice en la nota respecto a la posibilidad masiva de los ahorristas de poder preservar el valor de su trabajo y reservas, ya que además de BTC se podía acceder a monedas estables con pesos en forma directa. La especulación respecto a este motivo es que principalmente es un problema de caja.
Como bien cubre Infobae, la operatoria, más temprano que tarde, requería que Lirium accediese al sistema de Contado con Liquidación para girar los fondos con órdenes de compra de criptomonedas al exterior. Esto sería lo que desató las alarmas y temores de las autoridades por el posible impacto sobre las exiguas reservas del BCRA. Si el sistema permanecía, podía generar una “dolarización” masiva a través de monedas estables a costa de reservas y debilitando el peso.
Es importante destacar que los bancos suspendieron el servicio ante el comunicado, pero no se trata de una norma expresa. Todos están esperando a leer el texto normativo para conocer el alcance de la veda a la vez que se evitan sanciones.
Existe mucha especulación respecto a la estrategia detrás de este lanzamiento. Muchos consideran que es una campaña de marketing de los bancos para posicionarse como más modernos y flexibles y que en realidad es el Estado el que no los deja cambiar. Otros que el Banco Central pensaba tolerar el servicio hasta que políticamente los obligaron a cambiar el rumbo y / o vieron la potencialidad de cambio radical que implicaba. Probablemente, nunca sabremos lo que realmente pasó y todas las versiones tengan algo de cierto.
Tal es el revuelo con este tema, que la noticia llegó a medios europeos como Europapress. De más está decir que este tipo de noticias e improvisaciones en nuestro ecosistema local, atentan contra la seguridad jurídica de cualquier empresa o emprendimiento que esté considerando radicarse en el mismo y / o vea la gran comunidad crypto local como una oportunidad para expandir su negocio.
En conclusión, hay que esperar a la normativa para conocer su verdadero alcance, pero es probable que los bancos queden vedados de operar con criptoactivos y terminen necesitando generar nuevas sociedades para transaccionar en estos mercados. Lo que obliga a mayor burocracia, costos operativos, demoras, etc. Desde nuestro lugar, sería deseable contar con mayores consensos entre los grandes jugadores de este mercado y los reguladores para poder ir desandando un camino más lento pero seguro hacia una modernización del sector y mayor acceso a estos activos. Las decisiones abruptas y sorpresivas (de cualquiera de los dos lados) perjudican a todo el ecosistema y fundamentalmente al ahorrista.
Compartimos el video con la presencia de nuestro representante y especialista en este tema, Diego Nunes en el programa Generadores TV del 23 de mayo – 2022, con Juan Sosa Fernández donde conversaron al respecto.
Diego J. Nunes
Socio
Estudio Nunes & Asoc.