Crypto-minería y energía en Argentina. Un plan de negocios en constante cambio

Por 31 julio, 2022 No Comments

Como ya cubrimos en nuestro artículo Minería Cripto en Argentina, el negocio en papel era “demasiado bueno para ser verdad”; el tiempo demostró que nuestro cauto consejo a inversores demostró ser acertado. Con un claro giro político en materia de subsidios por parte del gobierno actual, es importante actualizar esta información para entender si sigue siendo o será buen negocio minar criptoactivos en nuestro país.
Para quienes quizás no conozcan cómo funciona la minería de estos activos, recomendamos este artículo de iProUp. Si bien la fantasía de “tener la máquina de hacer dinero en casa” en parte se hace realidad con estos equipos, es importante entender la realidad de lo que generan y cómo es que se producen ganancias. También resulta fundamental el encuadre jurídico y contable de estos activos para que quienes sean dueños de estas máquinas puedan incluir los activos que generan en sus declaraciones juradas y puedan disponer legalmente de los mismos, pagando los impuestos correspondientes.
Como comentamos en diversas notas, la minería de criptomonedas (especialmente las que usan el método de consenso “Proof of Work” o PoW) consume una gran cantidad de energía, principalmente por la necesidad de refrigerar constantemente los equipos. Los equipos de minería tienen características muy distintivas que se evidencian en el medidor de consumo y las facturas de las distribuidoras (constancia, potencia y consumo); esto hace que los grandes proyectos de minería sean fácilmente identificables por las autoridades.
Esta particularidad del consumo eléctrico de los equipos de minería, incluso llevó a algunos funcionarios a responsabilizarlos por los cortes en el suministro, como bien cubrió el medio La Política Online. Es un discurso que claramente no se sostiene desde lo técnico justamente por la estabilidad que presenta este consumo. Además, la Ciudad de Buenos Aires tiene problemas de infraestructura en su suministro energético desde hace más de 20 años, con un consumo que crece (sobre todo en verano), una población que no ahorra energía, un transporte deficiente y una inversión casi nula, por lo que entendemos que se trata más de un chivo expiatorio que de una responsabilidad real. Sin embargo, ya desde diciembre de 2021 algunos funcionarios tenían en la mira a este sector de la economía.
Si bien el mayor movimiento respecto a los subsidios empezó a generarse desde la Secretaría de Energía desde el pico del precio de los combustibles fósiles generados por la invasión rusa a Ucrania, recién ahora este plan de recorte del gasto público está llegando al público en general. En los últimos meses los usuarios que quisieran mantener sus subsidios se vieron forzados a actualizar la titularidad del dominio de los servicios. Como segundo paso, los interesados en mantener los subsidios deben declarar la totalidad de ingresos de su hogar para poder mantener el subsidio total o parcial. Se especula con que el precio de la energía a los valores actuales solo se mantendrá para hogares con ingresos por debajo de la línea de pobreza.
Considerando que el plan del gobierno es recortar los subsidios incluso para el consumo eléctrico residencial y que la industria de minería crypto está en la mira de las autoridades incluso desde antes que se diera este cambio de criterio, es más que esperable que, más pronto que tarde, quienes sean identificados como “mineros cripto” paguen tarifas a precio completo por su consumo energético. Sobre todo, pensando en que los activos que generan tienen cotización internacional.
Respecto a las empresas que se dedican exclusivamente a este negocio en forma directa u ofreciendo servicios de housing, es claro que serán los primeros en ver cambios en sus facturas. Sin perjuicio de ello, todavía no queda claro cuál es el plan respecto a los “micro- mineros”, particulares que quizás tienen una o dos máquinas conectadas en domicilios u oficinas, cuyo consumo no necesariamente es tan notorio y homogéneo. Lo más probable es que en una primera etapa puedan pasar desapercibidos por las autoridades, pero, si tuvieron fondos suficientes para invertir en dólares lo que cuesta una máquina de minería, es muy poco probable que entren en el universo de la población que mantendrá los subsidios.
Estas modificaciones en uno de los principales costos fijos del negocio, fuerzan a un replanteo del plan (hacia un escenario que nosotros siempre recomendamos considerar como escenario pesimista), considerando precios internacionales de la energía que necesitan los equipos. De todas formas, el rendimiento del negocio planteado depende de muchas variables, de las cuales la energía es solo una.
Entre las más relevantes, encontramos: el precio de compra de los equipos (siempre en dólares y en una época de escasez de los mismos por la gran demanda que tienen para esta industria y la del gaming), el equipo del que se trate y qué monedas puede minar (cada equipo solo sirve para determinadas monedas), la moneda elegida para el minado, el valor sucesivo que la moneda vaya teniendo y la oportunidad en la que se venden progresivamente los activos. Incluso si no fuese a variar el precio de la energía como costo fijo, es un negocio tan variable que sus proyecciones deben ser revisadas constantemente.

Diego J. Nunes
Socio
Estudio Nunes & Asoc.